La NFL habría entregado balones desinflados, ¿Deflategate 2?

La NFL finalmente sacó la esperada secuela del Deflategate, pero la protagonizan ellos en un sorprendente giro de eventos. Así es, un nuevo reporte descubrió que los mismos que castigaron duramente a los Patriots por supuestamente hacer esto hace años, también lo hacen como si nada.

Nueva investigación descubrió que la NFL entregó balones desinflados

Los Patriots cayeron 17-27 contra los Chiefs en la semana 15 NFL, pero mientras muchos destacan el declive de los primeros, una historia fue pasada por alto hasta hace poco. Y es que si hacemos memoria, no fue un buen día para ninguno de los dos pateadores de ambos equipos.

Masslive.com llevó a cabo una investigación en los últimos días que descubrió que la liga entregó balones desinflados al inicio del encuentro. Al principio, ninguno de los dos equipos se percató de este detalle, pero una fuente le comentó al periódico que los balones se sentían “inusualmente suaves” al tacto.

Primero falló el K Harrison Butker, un élite con todas las de ley. Su potencia en la pierna es conocida, pudiendo conectar el 87.1% de ellas hasta la parte más profunda del campo. No obstante, había algo raro en todas sus patadas de la primera mitad: la trayectoria, que fue cada vez más a menos.

La gota que derramó el vaso fue en el momento que el K Chad Ryland, que no ha tenido precisamente un buen primer año, erró un intento de 41 yardas con el que pudo abrir el marcador a favor de los Patriots. Según escribe el reporte “las mecánicas del novato fueron buenas en el intento, pero el vuelo del ovoide fue raro.”

La NFL establece en su reglamento que los balones deben estar entre las 12.5 y 13.5 PSI, no más, no menos. Pues bien, los que entregó su gente estaban en 11.5 PSI, muy por debajo del límite que ellos obligan a seguir a rajatabla. El ajuste lo hicieron en el descanso y la diferencia fue notable.

En la segunda mitad, Butker conectó dos goles de campo, mientras que Ryland no volvió a errar un intento de patada. Ambos tuvieron un mayor promedio en intentos de kickoff, pasando de 64.4 yardas a 66.6 yardas. También los despejadores pasaron de 45.3 yardas por intento a 51.8 yardas en los últimos dos cuartos.

¿Realmente podemos esperar justicia?

Desgraciadamente, los equipos no podían hacer nada antes porque la liga se volvió muy estricta con este tema a raíz del Deflategate original la década pasada. Ahora ningún equipo puede tocar los balones del partido durante los precalentamientos y solo son manipulados por oficiales autorizados. Es todavía peor cuando se detalla que deben pesar cada uno antes de guardarlos muy bien 45 minutos antes del encuentro.

Esta vez, la NFL no puede echarle la culpa a Tom Brady (a quien suspendió cuatro juegos por algo parecido), quitarse picks del Draft NFL, aunque podrían compensar de algún modo… pero no nos hagamos ilusiones. Esta gente es la hipocresía andante, y lo vemos en sus manejos de la seguridad de sus jugadores y el tema de las apuestas.

Lo único que podemos rescatar es que prueba el sinsentido que fue el escándalo original, llegando a querer manchar a una organización sin pruebas sólidas y todo para que finalmente ellos hagan lo mismo que acusaron años después.

¿Qué opinas de esta segunda parte del Deflategate? ¿Cuál debería ser el castigo justo a la NFL por esto? Puedes dejarnos tus comentarios debajo de este artículo o a través de nuestras publicaciones en redes sociales.

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